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Minería Ilegal: Una agenda pendiente con la salud pública y el desarrollo sostenible

15 Junio, 2022
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Miguel Angel Carrera Muñoz

M.Sc. Biólogo – Docente del Curso de Salud Ambiental de la Maestría en Salud Pública

Perú, país megadiverso y con una agenda ambiental en retroceso a consecuencia de una débil institucionalidad ambiental, nos ha convertido en mudos testigos de una problemática compleja originada por el desarrollo de diversas actividades antrópicas, entre ellas: la minería, tala ilegal, deforestación, tráfico de insumos químicos peligrosos como el mercurio, contaminación de aire, suelo y agua, entre otras amenazas debido a las malas prácticas de cumplimiento respecto al desempeño ambiental que garantizaría la sostenibilidad de nuestros recursos.

Una de las regiones más impactadas por las actividades antes descritas es la región Madre de Dios, en la que el evidente deterioro de la calidad ambiental resulta preocupante, puesto que la denominada Capital de la Biodiversidad en el Perú, paradójicamente viene siendo devastada por una intensa actividad de minería ilegal, tal como lo señala el portal de periodismo ambiental Mongabay[1],  en el que se recoge información del Proyecto de Monitoreo de la Amazonía Andina (MAAP), quienes mediante un análisis de imágenes satelitales indican que en los últimos dos años —entre marzo de  2019 y marzo de 2022— la deforestación aumentó entre 50 % y 448 % en cuatro comunidades indígenas: Puerto Luz, Tres Islas, Barranco Chicoy Boca Inambari; asimismo, según evidencia de investigación científica reportada por el Centro de Innovación Científica Amazónica (CINCIA)[2], existen múltiples estudios que demuestran que la minería ilegal en el cauce de ríos de la Amazonía provoca de 5 a 10 veces mayor carga normal de sedimentos, disminuyendo el hábitat de peces y poniendo en riesgo la pesca local y regional, además, reduce la calidad del agua para comunidades rurales, y aumenta la vulnerabilidad del río ante eventos extremos (sequías e inundaciones), siendo uno de los puntos de mayor preocupación, el crecimiento de forma significativa de la contaminación por mercurio en el pescado proveniente de los ríos de la zona, que se consume en los mercados locales (el metilmercurio es el compuesto orgánico presente en estos alimentos), representando tal condición, una de las principales vías de exposición al mercurio[3], que según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es uno de los diez productos o grupos de productos químicos que plantean especiales problemas de salud pública, por tanto, la actividad minera aurífera ilegal, entre otros daños ambientales,  en los cuerpos de agua aumenta el riesgo de impactos negativos para la afectación de los ecosistemas, calidad ambiental y salud de la población, principalmente en los grupos vulnerables como los niños, adultos mayores, las mujeres en edad fértil y las poblaciones indígenas asentadas en las áreas de influencia directa e indirecta de estas actividades ilegales.

Lamentablemente para el Perú, la situación política y la débil gobernanza existente, resulta siendo uno de los principales problemas que no coadyuvan en la tarea de alcanzar el ansiado desarrollo sostenible, a nivel nacional, regional y global, dado que, es evidente la falta de adecuados procesos que permitan la mejor toma de decisiones, dependiendo ello del trabajo articulado de las instituciones públicas responsables de garantizar las políticas ambientales y de salud pública, y que permitan la generación de marcos normativos que regulen de manera definitiva estas actividades de minería ilegal, de forma idónea y que faciliten el cumplimiento de metas en beneficio de la población y el medioambiente, pues a la fecha, solo se ha podido evidenciar escaso interés por propiciar una verdadera reforma de las políticas públicas vinculadas a estos ejes estratégicos.

Por lo antes expuesto, nuestras autoridades tienen el reto de convertirse en líderes del cambio, para la construcción paso a paso y con sólidas bases, del crecimiento económico, social y ambiental, logrando un equilibrio, para tener un planeta sostenible, justo, con progreso y bienestar para todos, permitiendo a su vez, contrarrestar la real emergencia ambiental existente a nivel global, que resulta siendo una amenaza constante, por ello, con el cumplimiento de esta propuesta, se propicia además de establecer un futuro sostenible para el país, consolidar el logro de una verdadera justicia ambiental y respeto a los derechos humanos, sin víctimas, sin pérdida de recursos actuales y futuros, ya que todos nosotros dependemos de una sola tierra, la única existente, como lo dijo el Papa Francisco en su Carta Encícilica “Laudato si”: Nuestra casa común.


[1]

Praeli, Y. S. (26 de Mayo de 2022). Obtenido de Periodismo Ambiental Independiente en Latinoamérica: Mongabay. https://es.mongabay.com/2022/05/aumenta-deforestacion-por-mineria-ilegal-en-peru/

[2] Luis E. Fernández, Cesar F. Ascorra Guanira, Claudia M. Vega, Julio Araujo-Flores, France. (Enero 2022). Impactos ambientales previstos de la actividad minera aurifera ilegal en cuerpos de agua de la amazonía peruana. Documento de síntesis científica No 1. Obtenido de http://cincia.wfu.edu/wp-content/uploads/2022.03.14_-DSC-1_IMPACTOS-AMBIENTALES-PREVISTOS-ACTIVIDAD-MINERA-ILEGAL-EN-CUERPOS-DE-AGUA-DE-LA-AMAZON%C3%8DA-PERUANA.pdf

[3] OMS. (2017). Organización Mundial de la Salud: El Mercurio y la salud. Obtenido de https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/mercury-and-health